Dibujo de Leonardo Da Vinci
Hay días en que funcionás en "modo a prueba de fallos": haciendo lo mínimo, respondiendo lo indispensable, ahorrando energía. En ese plan se puede descubrir qué tareas son insoslayables o qué encuentros no se negocian; es posible tocar la fibra de la necesidad, que sigue bajando a niveles inexplorados, porque el paradigma siempre fue el de tener más, de hacer más, de existir más.
No es cierto que el modo a prueba de fallos te salve de meterte en problemas. Es posible que en cualquier momento tengas que activar las turbinas y afrontar lo que venga, con la desorientación de quien estaba durmiendo la siesta y se despertó con el agua hasta acá. No obstante, y para eso sirve este modo especial, hay dilemas que se abisman si son abordados con demasiada voluntad resolutiva.
Probá a dejar ese tema en paz por un tiempo. Tal vez no haga falta instalar actualizaciones. Reiniciá esta noche o mañana. Sólo al cabo de un tiempo, volvé a abrir la pestaña cerrada. Mientras tanto hay otros modos de existencia.
Comments